domingo, 15 de marzo de 2015

Todo a su tiempo



Las cosas no siempre pasan como uno quiere. No hasta que te das cuenta de que también es interesante dejar que pasen a su tiempo. La cosa es sencilla, el tiempo es como una entidad invisible que hace su tarea desde un cuarto blanco y oscuro y una vez que analiza la situación envía sus resultados y modificaciones por mail hasta que nos cae el veinte. Es chistoso pensar que las varias relaciones que llevo con varios vatos parecen estar sincronizadas en el tiempo para que en cuanto termine una llegue la otra. Anoche vino A, pensé que era B pero se me hizo raro que sólo tocara la puerta si tiene llaves, aún así no abrí. Eso fue como a las 3 pm. luego a las 9 pm. otra vez tocan y ahora sí me atrevo a mirar por orificio de la puerta: era A. Luego de un año de no vernos se aparece, justo el año que duré con B. Y todavía en ese año que estuve con B terminamos y volvimos como en 4 ocasiones, la ruptura duraba como una semana; justo la semana en que C hacía aparición y me escapaba con él un par de ocasiones.

Mis relaciones son un desastre creo, aunque tal ves no sean tan diferentes de las de la gente normal. Mis relaciones son puro sexo, excepto con B que fué una cosa realmente hermosa y extraña. Con A la onda es como de mercancias negociables, viene se pasa a la sala, vemos un rato la tele, comemos zucaritas, vamos al aurrera, compramos más zucaritas, y cuando dice: "ahorita que termine el capítulo 22 de dragon ball gt nos metemos a bañar" ya valió madres la cosa. Se quita su short, sus calzetines, el baño comienza a tener un aroma extraño entre jabonoso pies y ropa húmeda, se mete a la regadera y comienza a mojar su cuerpo, shampoo y jabón para el consentido, más agua  hasta que el aroma se torne cada vez más jabonoso, aroma de hierbas del paraíso, menos olor a pies y ropa húmeda sólo hierbas del paraíso. Yo también aparezco en la obra, me quito mis boxer y calcetines, paso a la regadera y busco los espacios donde cae el agua que no son usados por A, me enjabono el cuerpo y vuelvo a buscar los espacios de agua donde no esté A para enjuagarme nuevamente. Estoy en el paraíso, sólo A yo y olor de hierbas del paraíso. 

Tal vés mi tiempo no sea el tiempo de la gente normal. Vivo en un departamento de paredes blancas y oscuras como las que mencioné al inicio del tiempo. Tal vés yo soy el tiempo escribiendo desde ésta laptop después de un año de no escribir en el blog, y analizar la situación para enviar los resultados por mail hasta que aparece éste post.




martes, 11 de marzo de 2014

¿Los niños de la calle conservan fotos familiares?



Fotos familiares. 


Mi cuarto es blanco como los dientes de leche un niño. De hecho, todo mi departamento es tan pero tan blanco que podrías confundirlo con una de esas nubes mañaneras que se menean por el cielo y casi parecen transparentes ante el viento. 

Hace días pensé en poner cuadros. Ahora que lo recuerdo bien, mi mamá siempre fue "muy minimal" para los detalles de la casa; nunca veías fotos familiares en exceso, o al menos no como, en esas casas en las que decoran las paredes con papel tapiz tamaño familiar. De esas en las que subes por la escalera y ves crecer al chamako en fotografías. 

Mi departamento era un cubo blanco sin vida y quería decorarlo sin caer al papel tapiz familiar, entonces busqué en algunos bazares y seleccioné unas cuantas fotos. El bazar era grande y tenía de todo. Ya ves, el montón de cosas empolvadas, repasadas por un pincelazo de magitel y agua, algunas muy antiguas que ya no ves en el mercado, amontonadas así casi apeñuscadas, en donde recorrer todo sin perder detalle es un verdadero arte; cada vez te encuentras cosas más y más raras, diferentes.

Hasta que llegué a las fotos familiares.

Había bastantes, apiladas en torres y empolvadas, unas muy viejas en blanco y negro, otras casi más actuales, pero no veías ninguna foto que pasara de los dosmiles. Podías notarlo en sus ropas. Algunas eran posadas completamente, otras infraganti, las situaciones eran variadas, desde el niño subiendo al árbol hasta la cena de navidad. Era curioso e intrigador imaginar lo que estaba ocurriendo en cada una de ellas.

Las fotos familiares son como los guiones de un cuento, un cuento que también se vuelve familiar y que la gente guarda en unas cosas llamadas álbumes, o ahora en dos mil catorce, usb.  En éstos álbumes recopilan su historia familiar. Es el registro en carne y hueso de su única y exclusiva historia de vida que da fe y legalidad a la frase "recuerdas aquella ocasión en que". La foto familiar es la mera atestiguación palpable y visible de que alguna vez fué y de que alguna vez sé fué

Es curioso pero  hablar de un hombre sin fotos familiares, o que las ha perdido por completo y no puede recuperarlas, es como hablar de un hombre sin sustento que dé soporte a su narrativa actual de vida, en pocas palabras es como hablar de un hombre sin alma. Es entonces cuando las fotos familiares toman tanta fuerza y se convierten en tabiques narrativos que aglomerados forman una identidad familiar, y por ende una identidad propia.

No sé si la gente con fotos familiares en exceso es la que camina entra la cordura y la locura "sostenida" de ese soporte de papel. Lo que sí sé es que la gente que ha llevado una vida familiar común y corriente y que por alguna circunstancia termina en la calle, generalmente terminan por guardar al menos una foto como su última opción de aferrarse a ese "guión" que le mantiene en la cordura. 

Ahora bien, ¿qué sucede con la gente realmente de la calle que ha perdido completamente esa conexión con las fotos familiares? 

¿qué sucede si creciste en la calle? 

¿Los niños de la calle tienen fotos familiares?
  


            

            

            

martes, 21 de junio de 2011

Espero

este humo sabe a pavimento con bache

pero fumando

Espero

en el aroma blanco del cuarto.

sábado, 9 de abril de 2011

amarillo

Lo peor de la noche

           -luego de beberse la luna-

es que amanece en amarillo.



domingo, 26 de diciembre de 2010

26 de Diciembre. (Detesto los domingos)

Podría jurar que está a punto de reventar. Y no me sorprende pues siempre sucede, siempre se calma, siempre se infla, y siempre termina por reventar. Sobre todo los ultimos días del año, cuando hago la recolección de los datos. Y no necesito ser matemático para saber lo que sucede alrededor. Es solo cuestión de dividir mis 24 años de edad entre el cúmulo de almohadas solitarias, los cuartos de hotel, las botellas de vino y los andares de noche; eso sin contar los 8 pesos que subieron los cigarrillos, los 9 grados de pleito entre mis padres y los 100 megabytes de distancia entre el chico del feis que me gusta y mis "que ondas" matutinos. Todo es pura mierda. En realidad lo es esta noche y no necesito ser matemático para saberlo.

jueves, 9 de septiembre de 2010

deformar el silencio.

Las palabras que te digo
son como el              muro blanco
de la casa; sin retratos, ni ventanas.

Canto al viento
las vocales chimuelas del
corazón.

Tarareo a destiempo
tus labios                mudo, terremoto y bemol.

Necesito deformar el silencio
balbucear fregadera y media
arreglar las entrañas.

Vocal chimuela, terremoto, corazón
corazón, vocal chimuela, terremoto
terremoto, corazón, vocal chimuela

miércoles, 8 de septiembre de 2010

Dirección.



 "Por las noches mientras duermo, recorro las avenidas de la ciudad que durante el día no encuentro" 

Rodolfo Dagnino.  



Hace meses teñió su pelo de "azúl jeven" y jugamos a dar vueltitas como dos trompos envueltos en la inercia del viento. Reímos y cantamos juntos. Advertí el cristal en sus ojos cuando perdió sus hermosos tennis rojo dragón. Le ví vestirse de blanco y recitar poesía-niño, caminar por la carretera solo a altas horas de la noche, bajar del tren entre la multitud y el desorden y perderse en la ausencia...Anoche los mundos conspiraron nuestro tiempo-espacio y sangre y me lo topé de nuevo. Jugamos juntos al calor, dormimos el alma, nos bebimos los labios a sorbetes y exploramos el corazón. Le conozco perfectamente pero no sé donde vive... ¿acaso tiene dirección?